A modo de introducción de este blog, quiero dejar claro que existe mucha información en internet, en libros, etc., pero a veces es dificil saber cuál de ella aporta datos que son reales. Desde mi punto de vista, es útil usar cualquier página de internet para saber qué puede ser verdad, pero después, es inteligente buscar esta misma información en bases de datos más fiables, para contrastarla.
Estas fuentes son los artículos o publicaciones científicas, ya que éstos han seguido un método de experimentación o de recopilación de datos que sigue un método científico y que por tanto, en principio, puede ser repetido por otros científicos para comprobar si es información válida o no. Estos artículos pueden ser más fiables o menos dependiendo de las condiciones en que se han realizado y esto puede saberse comparando con otros artículos o atendiendo a la manera en que han obtenido los datos.
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